lunes, 27 de julio de 2009

Ofensiva a la Iglesia por parte de la escoria


Nuevamente esta panda de malnacidos ataca a los que menos se lo merecen, a las Iglesias. Como no son capaces de reconocer que su vida no tiene ningún sentido y que sería mejor que no estuvieran en la tierra, se dedican a joder a los que ayudan de verdad y a los que tienen fé.
Poniendo pintadas como "arderéis como en el 36" o "la única iglesia que ilumina es la que arde", simplemente desmuestran lo que son, escoria, ni más ni menos, la escoria de la sociedad.
Si esto es España, que venga Dios y lo vea.



Un grupo radical sabotea iglesias en recuerdo de la Setmana Tràgica
Una veintena de iglesias de Barcelona amanecieron ayer con la desagradable sorpresa de encontrar sus paredes exteriores repletas de pintadas ofensivas, las cerraduras selladas y las puertas encadenadas. Los responsables de semejante broma son un grupo que se autodenomina La Gallinaire y que la madrugada del domingo decidieron que la mejor manera de recordar la Setmana Tràgica de 1909 es volver a sabotear los templos de la ciudad, aunque en esta ocasión, sin llegar a quemarlos.El objetivo, según reza un manifiesto de este colectivo radical, era que ayer no se pudiera decir misa; ya fuera porque el párroco no era capaz de reventar el enorme hierro que impedía el paso, porque las bombas fétidas o los excrementos de animal introducidos por cualquier orificio convertían la iglesia en una cuadra o porque las pintadas –con adjetivos tan originales como «pederastas» o «genocidas»– eran demasiado ofensivas como para que los feligreses acudieran a su cita dominical.
SORPRESA RELATIVA / El padre Victor, del oratorio de Sant Felip Neri, en Gràcia, no parecía ayer muy sorprendido. Reconoció que los días anteriores incluso bromearon con la idea de «hacer guardias nocturnas» ante la posibilidad de ataques y se puso serio al sentenciar que nadie iba a decidir por ellos si había misa o no. Eso sí, este templo tuvo que dejar las puertas abiertas durante el oficio matinal debido al tremendo hedor de las bombas fétidas, que durante toda la noche escamparon su perfume por el oratorio. Curiosamente, la placa que el sábado se destapó en este edificio que hace un siglo fue pasto de las llamas no sufrió daño alguno. «Supongo que no vieron la información en la prensa, porque de haberla visto se la habrían cargado seguro», bromeó el padre Victor.
PRESAGIO DE MARAGALL / Este religioso, un hombre joven y afable, parecía incluso satisfecho de haber abierto la portalada del oratorio, ya que este era, apuntó, «uno de los deseos que Joan Maragall expresaba en su escrito Església cremada», dedicado precisamente a los históricos hechos de aquel julio del año 1909.En el comunicado, La Gallinaire condena a la Iglesia católica a la hoguera por «estar gestionada como una multinacional que mantiene intacto su enorme patrimonio y que recibe cada año del Estado 150 millones de euros». También asegura que la jerarquía católica «sigue imponiendo su hipócrita moral» y recuerda los casos de pederastia en los que se han visto implicados religiosos apuntando que «todavía hoy pretenden controlar y someter nuestros cuerpos mientras encubren los abusos sexuales de sus clérigos».
POR TODA LA CIUDAD / El grupo dejó su sello en iglesias de Sarrià, Sant Gervasi, Sant Andreu, Eixample, Ciutat Vella, Gràcia, Clot, Sant Andreu y Poblenou. Colocó en las puertas un comunicado con sus consignas y una foto de 1909 con varios templos humeantes. Entre sus mandamientos, sentencias como «la única iglesia que ilumina es la que arde» o «1909-2009, la lucha continúa». El comunicado ensalza el espíritu de ese 26 de julio de 1909 en el que, tras la decisión del Gobierno de enviar a los reservistas a combatir al norte de Marruecos, cerca de 80 edificios religiosos ardieron en una respuesta social tan contundente como inesperada. Ahora, 100 años después, La Gallinaire retoma esa lucha en versión suavizada. Y el padre Victor responde: «Los católicos de hoy no debemos sentirnos culpables».



Un grupo anarquista pinta los muros de una veintena de iglesias en Barcelona

Una veintena de iglesias de Barcelona amanecieron ayer con pintadas en sus fachadas alusivas a la quema de centros religiosos que tuvo lugar durante la Semana Trágica, de la que estos días se cumplen precisamente cien años. Las pintadas fueron reinvindicadas por un grupo autodenominado «La Gallinaire» a través de un comunicado rematado por el lema «la lucha continúa». Las parroquias afectadadas pertenecen a los barrios de Sarrià, Poblenou, Gràcia, Sant Gervasi, Raval, Eixample, Sant Andreu y el Clot y en algunas de ellas llegaron a taponar las cerraduras con silicona.

Los Mossos d´Esquadra aseguraron que investigarán el caso, aunque ni el Arzobispado ni ningún responsable de las iglesias había puesto denuncia. La nota reivindicativa, que los autores pegaron en las puertas de los templos, presenta pasajes de un enarcido anarquismo y va firmada «Ni Dios ni Capital». Además, incluye algunas de las frases con las que fueron «ilustrados» los muros de los templos barceloneses: «La Iglesia apesta, aunque hoy no arda», «la única iglesia que ilumina es la que arde» y «1909-2009, la lucha continúa».

«Más turistas que fieles»
El objetivo del grupo, según el panfleto, era el de impedir la misa dominical en el mismo día, 26 de julio, en el que comenzó «una Semana Trágica para la Iglesia y el Estado, pero que para miles de personas significó momentos de rebelión, comunidad, dignidad y aprendizaje». Y añade, ya en pleno delirio revolucionario: «Aunque en los templos haya más turistas que creyentes, la jerarquía católica sigue imponiendo su hipócrita moral». Los párrocos de las iglesias consultadas por ABC afirmaron que las misas dominicales se celebraron con normalidad y que la mayoría de los fieles ni siquiera reparó en las pintadas.

Los Mossos investigan el caso pese a que, según afirmaron el Arzobispado no ha puesto denuncia.

La Semana Trágica de Barcelona tuvo su origen en el reclutamiento forzoso de reservistas para la guerra que el Ejército libraba en el norte de África. La revuelta dio paso a un odio anticlerical y el 27 de julio una horda enfurecida quemó el centro de los Hermanos Maristas de Pueblo Nuevo, que abrió una larga lista.

1 comentario:

  1. Que mal nacidos y que vallan siempre de tolerantes, cuando cualquier cosa con la que no están de acuerdo, dicen, a la vamos a destruir, golpear, ¿matar?

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